jueves, 25 de febrero de 2010

La Vía Crucis

Viacrucis o vía crucis significa «camino de la cruz» y se refiere a las diferentes etapas o momentos vividos por Jesucristo desde el momento en que fue aprehendido hasta su crucifixión y sepultura. La expresión se usa también comúnmente para expresar todo tipo de dificultades que se presentan en la vida cuando se quieren alcanzar ciertos objetivos.
"Vía Crucis" latín de "Camino de la Cruz" . También conocido como "Estaciones de la Cruz" y "Vía Dolorosa". Se trata de un acto de piedad, un camino de oración que busca con la meditación de de la pasión y muerte de
Jesucristo en su camino al Calvario. El camino se representa con una serie de catorce imágenes de la Pasión o "Estaciones" correspondientes a incidentes particulares que Jesús sufrió por nuestra salvación basados en los relatos evangélicos y la tradición. También se llama Viacrucis al de cruces que señalan un camino o una ruta donde se puede realizar este ejercicio piadoso.


Primera estación: Jesús en el Huerto de los Olivos. (Mc 14, 32-36)
Segunda Estación: Jesús es traicionado por Judas y arrestado. (Mc 14,43-46)
Tercera Estación: Jesús es condenado por el Sanedrín.(Mc 14, 55, 60-62,64)
Cuarta Estación: Jesús es negado por Pedro. (Mc. 14, 66-72)
Quinta Estación: Jesús es juzgado por Pilato. (Lc 23, 1-4,23-24)
Sexta Estación: Jesús es flagelado y coronado de espinas. (Mt. 27, 26-30)
Séptima Estación: Jesús carga con la cruz. (Jn 19, 16-17)
Octava Estación: Jesús es ayudado por el Cirineo. (Mc 15,21)
Novena Estación: Jesús encuentra a las mujeres de Jerusalén. (Lc 23, 27-28)
Décima Estación: Jesús es crucificado. (Mc 15, 24-26)
Décima Primera Estación: Jesús promete su Reino al buen ladrón. (Lc 23, 39-43)
Décima Segunda Estación: Jesús crucificado, la Madre y el Discipulo. (Jn 19, 26-27)
Décima Tercera Estación: Jesús muere en la cruz. (Lc 23, 44-46)
Décima Cuarta Estación: Jesús es depositado en el sepulcro. ( Jn 19,41-42)

jueves, 18 de febrero de 2010

¿Qué es el ayuno?


Se llama ayuno al acto de abstenerse voluntariamente de toda o algún tipo de comida y en algunos casos de ingesta de líquidos, por un período de tiempo.
Puede realizarse por diversos motivos, pero los principales son
religiosos, como técnica curativa básica en la medicina naturistaó como manifestación pacífica. En este último caso suele llamárselo huelga de hambre.
El ayuno por razones espirituales y religiosas ha sido parte de las tradiciones humanas desde la prehistoria. Se menciona en la Biblia, en el Antiguo Testamento y en el Nuevo Testamento, en el Mahabhárata, en el Upanishad y en el Corán.
Dependiendo de la tradición, la práctica del ayuno puede prohibir actos sexuales (o cualquier deseo sexual), masturbación, así como el abstenerse de comer ciertos grupos alimenticios (como la carne).
Cuando se toma un pequeño
desayuno en uno de los días, se le llama a este parvo o parvedad
Los salmos invitan frecuentemente al ayuno personal en ocasiones de dificultad: salmos 35, 69, 109. Véase también: Daniel 9,3s.; 10,3; Esdras 10,6; Nehemías 1,4.
La práctica del ayuno era frecuente en el judaísmo del primer siglo y aparece en el
Nuevo Testamento, especialmente con los discípulos de Juán Bautista (Mc 2,18). Jesús ayunaba (Cf Mt 4) y su advertencia a no manipular esta práctica para atraer atención (Cf Mt 6,17; Lc 18,12) no debe interpretarse como un rechazo. Como los profetas, Jesús enfatizó la contrición y el arrepentimiento como la esencia del ayuno

¿Qué es la cuaresma?


La cuaresma (latín: quadragesima, 'Cuadragésimo día (antes de la pascua)' )? es el periodo del tiempo litúrgico (calendario cristiano) destinado por la iglesia Católica Romana y la Iglesia ortodoxa, además de ciertas iglesias evangélicas, aunque con inicios y duraciones distintas, para la preparación de la fiesta de Pascua.

La cuaresma comienza el Miércoles de Ceniza y termina antes de la Misa de la Cena del Señor del Jueves Santo. Vendrían a ser 40 días de preparación para la Pascua. La duración de cuarenta días proviene de varias referencias bíblicas y simboliza entre otras cosas, el retiro de Jesús 40 días en el desierto previo a su ministerio y el retiro de 40 días de Moisés en el desierto. También simbolizan los 40 días que duró el diluvio, además de los 40 años de la marcha del pueblo Judío por el desierto y los 400 años que duró la estancia de los judíos en Egipto. A lo largo de este tiempo, los fieles católicos están llamados a reforzar su fe mediante diversos actos de penitencia y reflexión. La Cuaresma tiene cinco domingos más el Domingo de la Pasión o de Ramos (seis en total), en cuyas lecturas los temas de la conversión, el pecado, la penitencia y el perdón, son dominantes. No es un tiempo triste, sino más bien meditativo y recogido. Es, por excelencia, el tiempo de conversión y penitencia del año litúrgico. Por eso, en la Misa católica no se canta el “Gloria” al final del acto penitencial (excepto el Jueves Santo en la misa de la Cena del Señor), ni el “Aleluya” antes del Evangelio. El color litúrgico asociado a este periodo es el morado que significa discreción, penitencia y dolor.

La práctica de la Cuaresma data del siglo IV, cuando se da la tendencia a constituirla en tiempo de penitencia y de renovación para toda la Iglesia, con la práctica del ayuno y de la abstinencia. Conservada con bastante vigor, al menos en un principio, en las iglesias de oriente, la práctica penitencial de la Cuaresma ha sido cada vez más aligerada en occidente, pero debe observarse un espíritu penitencial y de conversión.
Según San León, la Cuaresma es “un retiro colectivo de cuarenta días, durante los cuales la Iglesia, proponiendo a sus fieles el ejemplo de Cristo en su retiro al desierto, se prepara para la celebración de las solemnidades pascuales con la purificación del corazón y una práctica perfecta de la vida cristiana” (Esta definición es deducida del análisis del sermón 42).
Se trataba, por tanto, de un tiempo, introducido por la imitación de Cristo y de Moisés, en el que la comunidad cristiana se esforzaba en realizar una profunda renovación interior. El Catecismo de la Iglesia Católica retoma esta idea y la expresa de la siguiente manera: “La Iglesia se une todos los años, durante los cuarenta días de la Gran Cuaresma, al Misterio de Jesús en el desierto” (n. 540).

jueves, 4 de febrero de 2010

Jesús de Nazaret

Jesús de Nazaret, también conocido como Jesús, Cristo o Jesucristo, es la figura central del cristianismo. Para la mayoría de las denominaciones cristianas, es el Hijo de Dios y, por extensión, una encarnación de Dios mismo. Su importancia estriba asimismo en la creencia de que, con su muerte y posterior resurrección, redimió al género humano. En el Islam, donde es conocido por el nombre de Isa, lo consideran también como uno de sus profetas más importantes. Es uno de los personajes que han ejercido una mayor influencia en la cultura occidental.
Según la opinión mayoritariamente aceptada en medios académicos, basada en una lectura crítica de los textos sobre su figura, Jesús de Nazaret fue un predicador
judío que vivió a comienzos del siglo I en las regiones de Galilea y Judea y fue crucificado en Jerusalén en torno al año 30.
Lo que se conoce de Jesús depende casi absolutamente de la tradición cristiana, especialmente de la utilizada para la composición de los
evangelios sinópticos, redactados, según opinión mayoritaria, unos 30 ó 40 años, como mínimo, después de su muerte. La mayoría de los estudiosos considera que mediante el estudio de los evangelios es posible reconstruir tradiciones que se remontan a contemporáneos de Jesús, aunque existen grandes discrepancias entre los investigadores en cuanto a los métodos de análisis de los textos y las conclusiones que de ellos pueden extraerse. Existe una minoría que niega la existencia histórica de Jesús de Nazaret.
Los relatos referentes al nacimiento e infancia de Jesús proceden exclusivamente de los evangelios de Mateo (Mt 1,18-2,23) y de Lucas (Lc 1,5-2,52). No hay relatos de este tipo en los evangelios de Marcos y Juan. Las narraciones de Mateo y Lucas son diferentes entre sí:
Según Mateo,
María y su esposo, José, viven (según parece, pues no se relata ningún viaje ) en Belén. María queda inesperadamente embarazada y José resuelve repudiarla, pero un ángel le anuncia en sueños que el embarazo de María es obra del Espíritu Santo y profetiza, con palabras del profeta Isaías (Is 7,14), que su hijo será el Mesías que esperan los judíos (Mt 1,19-21). Unos magos de Oriente llegan a Jerusalén preguntando por el "rey de los judíos que acaba de nacer" con la intención de adorarlo, lo que alerta al rey de Judea, Herodes el Grande, que decide acabar con el posible rival. Los magos, guiados por una estrella, llegan a Belén y adoran al niño. De nuevo, el ángel visita a José (Mt 2,13) y le advierte de la inminente persecución de Herodes, por lo que la familia huye a Egipto y permanece allí hasta la muerte del monarca (de nuevo notificada a José por el ángel, que se le presenta por tercera vez: Mt 2,19-29). Entonces, José se instala con su familia en Nazaret, en Galilea.
En el evangelio según San Lucas, María y José viven en la ciudad
galilea de Nazaret. La historia de la concepción de Jesús se entrelaza aquí con la de Juan el Bautista —ya que en este evangelio María e Isabel, madre del Bautista, son parientes— y el nacimiento de Jesús es notificado a María por el ángel Gabriel (lo que se conoce como Anunciación: Lc 1,26-38). El emperador Augusto ordena un censo en el cual cada uno debe empadronarse en su lugar de nacimiento y José debe viajar a Belén, por ser originario de este lugar. Jesús nace en Belén mientras se encuentran de viaje y es adorado por pastores. Lucas añade además breves relatos sobre la circuncisión de Jesús, sobre su presentación en el Templo y su encuentro con los doctores en el Templo de Jerusalén, en un viaje realizado con motivo de la Pascua, cuando contaba doce años.
En los evangelios de Mateo y de Lucas aparecen sendas genealogías de Jesús (Mt 1, 2-16; Lc 3, 23-38). La de Mateo se remonta al patriarca Abraham, y la de Lucas a Adán, el primer hombre según el Génesis. Estas dos genealogías son idénticas entre Abrahán y David, pero difieren a partir de este último, ya que la de Mateo hace a Jesús descendiente de Salomón, mientras que, según Lucas, su linaje procedería de Natam, otro de los hijos de David. En ambos casos, lo que se muestra es la ascendencia de José, a pesar de que, según los relatos de la infancia, éste solo habría sido el padre putativo de Jesús.
Acompañado por sus seguidores, Jesús recorrió las regiones de Galilea y Judea predicando el evangelio y realizando numerosos milagros. El orden de los hechos y dichos de Jesús varía según los diferentes relatos evangélicos. Tampoco se indica cuánto tiempo duró la vida pública de Jesús, aunque el Evangelio según San Juan menciona que Jesús celebró la fiesta anual de la Pascua judía (Pésaj) en Jerusalén en tres ocasiones. Los sinópticos se refieren solo a una fiesta de Pascua, durante la cual Jesús fue crucificado.
Gran parte de los hechos de la vida pública de Jesús narrados en los evangelios tienen como escenario la zona septentrional de
Galilea, en las cercanías del mar de Tiberíades, o lago de Genesaret, especialmente la ciudad de Cafarnaúm, pero también otras, como Corozaín o Betsaida. También visitó, en el sur de la región, localidades como Caná o Naín, y la aldea en la que se había criado, Nazaret, donde fue recibido con hostilidad por sus antiguos convecinos. Su predicación se extendió también a Judea (según el Evangelio según San Juan, visitó Jerusalén en tres ocasiones desde el comienzo de su vida pública), y estuvo en Jericó y Betania (donde resucitó a Lázaro).
Escogió a sus principales seguidores (llamados en los evangelios
Apóstoles; en griego, «enviados»), en número de doce, de entre el pueblo de Galilea. En los sinópticos se menciona la lista siguiente: Simón, llamado Pedro y su hermano Andrés; Santiago el de Zebedeo y su hermano Juan; Felipe y Bartolomé; Tomás y Mateo el publicano; Santiago el de Alfeo y Tadeo; Simón el Zelote y Judas Iscariote, el que posteriormente traicionaría a Jesús (Mt 10,2-4; Mc 3,16-19; Lc 6, 13-16). Algunos de ellos eran pescadores, como las dos parejas de hermanos formadas respectivamente por Pedro y Andrés, y Juan y Santiago. Mateo se identifica generalmente con Leví el de Alfeo, un publicano de quien en los tres sinópticos se relata brevemente cómo fue llamado por Jesús (Mt 9,9; Mc 2,14; Lc 5,27-28). lo que acarreó a Jesús numerosos reproches de los fariseos.
El Evangelio según San Juan sólo menciona los nombres de nueve de los apóstoles, aunque en varios pasajes hace referencia a que eran doce.
Predicó tanto en
sinagogas como al aire libre, y las muchedumbres se congregaban para escuchar sus palabras. Entre sus discursos, destaca el llamado Sermón de la Montaña, en el Evangelio según San Mateo (Mt 5-7). Utilizó a menudo parábolas para explicar a sus seguidores el Reino de Dios. Las parábolas de Jesús son breves relatos cuyo contenido es enigmático (a menudo han de ser después explicadas por Jesús). Tienen en general un contenido escatológico y aparecen exclusivamente en los evangelios sinópticos. Entre las más conocidas están la parábola del sembrador (Mt 13,3-9; Mc 4,3-9; Lc 8,5-8), cuyo significado explica Jesús a continuación; la de la semilla que crece (Mc 4,26-29); la del grano de mostaza (Mt 13,31-32; Mc 4,30-32), la de la cizaña (Mt 13,24-30), la de la oveja perdida (Mt 18,12-14; Lc 15,3-7), la del siervo despiadado (Mt 18, 23-35), la de los obreros enviados a la viña (Mt 20,1-16), la de los dos hijos (Mt 21,28-32), la de los viñadores homicidas (Mt 21,33-42; Mc 12,1-11; Lc 20,9-18); la de los invitados a la boda (Mt 22, 1-14), la de las diez vírgenes (Mt 25,1-13), la de los talentos (Mt 25,14-30; Lc 19,12-27). Dos de las más conocidas aparecen solo en el Evangelio según San Lucas: se trata de las parábolas del samaritano (Lc 10,30-37) y del hijo pródigo (Lc 15,11-32). En las parábolas, utiliza Jesús frecuentemente imágenes relacionadas con la vida campesina.
Mantuvo controversias con miembros de algunas de las más importantes sectas religiosas del
judaísmo, y muy especialmente con los fariseos, a quienes acusó de hipocresía y de no cuidar lo más importante de la Torá: la justicia, la compasión y la lealtad (Mt 12, 38-40; Lc 20, 45-47)
La originalidad de su mensaje radicaba en la insistencia en el amor al enemigo (Mt 5,38-48;Lc 6, 27-36) así como en su relación estrechísima con Dios a quien llamaba en arameo con la expresión familiar Abba (Padre) que ni Marcos (Mc 14,36) ni Pablo (Rm 8, 15; Gal 4, 6) traducen. Se trata de un Dios cercano que busca a los marginados, a los oprimidos (Lc 4, 18) y a los pecadores (Lc 15) para ofrecerles su misericordia. La oración del
Padre nuestro (Mt 6,9-13: Lc 11,1-4), que recomendó utilizar a sus seguidores, es clara expresión de esta relación de cercanía con Dios.

El gran terremoto de Haiti del 2010

El terremoto de Haití de 2010 fue registrado el 12 de enero de 2010 a las 16:53:09 hora local (21:53:09 UTC) con epicentro a 15 km de Puerto Príncipe, la capital de Haití. Según el Servicio Geológico de Estados Unidos, el sismo habría tenido una magnitud de 7,0 grados y se habría generado a una profundidad de 10 kilómetros. También se ha registrado una serie de réplicas, siendo las más fuertes las de 5,9, 5,5 y 5,1 grados. La NOAA descartó el peligro de tsunami en la zona. Este terremoto ha sido el más fuerte registrado en la zona desde el acontecido en 1770. El sismo fue perceptible en países cercanos como Cuba, Jamaica y República Dominicana, donde provocó temor y evacuaciones preventivas.
Los efectos causados sobre el país más pobre de
América Latina han sido devastadores. Los cuerpos recuperados a 25 de enero superan los 150.000, calculándose que el número de muertos podría llegar a los 200.000. También habría producido más de 250.000 heridos y dejado sin hogar a un millón de personas. Se considera una de las catástrofes humanitarias más graves de la historia.
La isla
La Española, que comparten Haití y la República Dominicana, es sismológicamente activa y ha experimentado terremotos significativos y devastadores en el pasado.
Un sismo la estremeció en 1751 cuando estaba bajo control francés y otro
sismo en 1770 de 7,5 grados en la escala de Richter devastó Puerto Príncipe por completo .De acuerdo con el historiador francés Moreau de San-Méry (1750-1819), "mientras que ningún edificio sufrió daños en Puerto Príncipe durante el terremoto del 18 octubre de 1751, la ciudad entera colapsó durante el terremoto del 3 de junio de 1770".
La ciudad de
Cabo Haitiano, así como otras del norte de Haití y la República Dominicana, fueron destruidas por el terremoto del 7 de mayo de 1842.
En 1887 y 1904 se produjeron dos terremotos, uno por año, en el norte del país, causando «daños mayores».
En 1946, un
terremoto de magnitud 8.0 se registró en la República Dominicana, afectando también a Haití. Este sismo produjo un tsunami que mató a 1.790 personas.
Un estudio de prevención de terremotos realizado en 1992 por C. DeMets y M. Wiggins-Grandison estableció como conclusión la posibilidad que la
falla de Enriquillo pudiera estar al final de su ciclo sísmico y pronosticó un escenario, en el peor de los casos, de un terremoto de magnitud 7,2, similar en magnitud al terremoto de Jamaica de 1692.
Paul Mann y un equipo de estudio presentaron en 2006 una evaluación de riesgo en la
falla de Enriquillo en la 18ª Conferencia Geológica del Caribe en marzo de 2008. Tomando en cuenta la gran tensión, el equipo recomendó "de alta prioridad" los estudios históricos de movimientos sísmicos, como el de la falla, que fue totalmente bloqueada y había registrado algunos terremotos en los últimos 40 años. . Un artículo publicado en el diario Le Matin de Haití en setiembre de 2008 mostraba los comentarios citados por el geólogo Charles Patrick de que había un alto riesgo de mayor actividad sísmica en Puerto Príncipe.
El terremoto ocurrió tierra adentro, el 12 de enero de 2010, aproximadamente a una distancia de 15 km al
sudoeste de Puerto Príncipe y a una profundidad de 10 km, a las 16: 53 UTC-5.Tuvo una magnitud de 7,0 en la escala de Richter y se sintió con una intensidad de grado IX en la escala sismológica de Mercalli en Puerto Príncipe. También se registró en Cuba, Jamaica, Venezuela y en el país limítrofe de República Dominicana. El Servicio Geológico de Estados Unidos había registrado al menos seis réplicas en las dos horas después del terremoto principal. Midieron aproximadamente 5,9, 5,5, 5,1, 4,8 y 4,5 Durante las primeras nueve horas se han registrado 26 réplicas mayores a 4,2 en diferentes puntos de la península de Tiburón, de los cuales doce son mayores a los 5,0.El día miércoles, 20 de enero a las 11:03:44 UTC una fuerte réplica de de 6,1 , luego rectificada a 5,9 grados en la escala de Richter. Se registró a 60 kilómetros al oeste de Puerto Príncipe y se sintió en la capital haitiana, según datos del Servicio Geológico de Estados Unidos. Justo durante el terremoto, la red de microblogging Twitter se vino abajo..
El
terremoto se produjo en las cercanías del límite norte de la placa tectónica del Caribe, que se desplaza continua y lentamente hacia el este 20 mm por año en relación a la placa norteamericana y atraviesa justamente por el medio de la isla La Española. El sistema de falla de desgarre o transversal formada en la región parecido a la falla de San Andrés en California, Estados Unidos, tiene dos ramas en Haití, el fallo septentrional, en el norte, y la falla de Enriquillo en el sur. Los datos sísmicos sugieren que el terremoto fue sobre la falla de Enriquillo, que estuvo bajo presión durante 240 años, acumulando mucha energía potencial, la cual desató finalmente un gran terremoto liberando una energía equivalente a la explosión de 200 000 kilos de trinitrotolueno (dinamita)
De acuerdo con un miembro del servicio geológico de Estados Unidos, en base a la magnitud y ubicación del terremoto, alrededor de tres millones de personas se han visto afectadas,aunque datos exactos tardarán en llegar debido al alcance de los daños.

El
Centro de Prevención de Tsunamis del Pacífico lanzó una alarma de tsunami después de ocurrido el terremoto para Haití, Cuba y República Dominicana, que fue cancelada poco después.

No obstante, el gobierno de Cuba dio la orden de evacuar a todas las poblaciones costeras, especialmente del municipio oriental de
Baracoa.El terremoto ha sido calificado como el mayor sismo registrado en Haití en doscientos años. Una de las consecuencias del terremoto fue el colapso de todas las líneas telefónicas, siendo fundamental el uso de Internet, mediante redes sociales como Twitter y Facebook, portales de vídeo como YouTube, e-mails y transmisiones vía web de radios y televisión. Las redes sociales en especial han sido ampliamente usadas para la obtención y difusión de información e imágenes del suceso.Haití es el país más pobre de América, caracterizado por tener cerca del 80% de su población por debajo de la línea de pobreza (el 54% viven en la pobreza extrema), una economía de subsistencia, es decir, viven prácticamente para alimentarse; las remesas recibidas de migrantes representan el 40% de su PIB beneficiando a poco más de 900 mil familias. Este país ocupa el puesto 149 de 182 países según el Índice de Desarrollo Humano, lo que genera preocupación sobre todo en la capacidad de hospitales y servicios básicos de salud y primeros auxilios para poder afrontar una catástrofe sísmica de esta envergadura.